“Comunicación” es acción en común. Coordinarnos con otra persona en busca de cierto resultado. Generamos realidades que solos, no podríamos lograr. ¿Y qué nos pasa? Que muchas veces, eso que parece debiera ser fácil si hablamos en el mismo idioma… se vuelve confuso, aparecen los malos entendidos, los enojos de uno y otro lado (“¿cómo puede ser que no me entienda, que tenga que repetirlo una y mil veces?”), con mensajes que no se interpretan “bien”, con acciones que, al final, no producen el resultado esperado.

Hoy, qué NO hacer, si queremos mejorar en nuestra comunicación:

. No estar confiados en que, porque lo dije/escribí, el otro lo entendió (como yo pensaba) y lo va a ejecutar:

Un email, un mensaje, una charla personalmente. Fuimos “claros”. Y ahora, a esperar que el otro lo cumpla como y cuando queremos. Y nos olvidamos de verificar qué es lo que el otro entendió.

. Muy relacionado con lo anterior: No establecer una fecha, un momento en el cual queremos esa respuesta/acción del otro; ni las condiciones/características de aquello que solicitamos.

¿Para cuándo quiero que esté hecho aquello que le pedí a la otra persona? “Esta semana”, puede ser desde hoy mismo, hasta el viernes (o por qué no, domingo). “Cuando puedas”, es, literalmente, cuando “el otro pueda ejecutarlo” (con sus tiempos, sus prioridades).. ¿y si termina siendo un “nunca”?

. No especificar a quién se pide algo ( raramente es “a todos”)

“Que lo vean”, “Organicen”, “Arreglen esto”, “Lo quiero resuelto”, “Averigüen”: ¿A quién se lo estoy pidiendo? Un pedido se hace a alguien (o varios) en concreto. Claro, muchas veces eso “nos cuesta”, no nos sale tan fácil. ¿Será que nos expone más? ¿Qué quizás pedimos siempre a la misma persona, que es la que sabemos lo llevará a cabo? (bueno, ahí, tenemos otro problema).

Y atención: que esa/s personas acepten ejecutarlo.

. No diferenciar una opinión de un hecho.

Que alguien sea “impuntual” es una opinión (como una “etiqueta” que le asignamos – sea, o no cierto). “La reunión era a las 9hs, y llegaste 9.15hs”, es un hecho.

La opinión es mía, frente a cierta situación, y la armo en función a mis pensamientos, mis creencias, mi historia, mis valores. El otro, puede pensar distinto (y aquí, una gran clave: ¿cómo hago para entender al otro?. (y lo dejo para una próxima nota ).

En cambio, un hecho, otros lo pueden “ver”, “validar”, “comprobar” de la misma forma que yo.

Muchas veces, tomamos opiniones como si fueran “LA” verdad universal, y ahí… si el otro razona distinto, suelen comenzar los problemas.

La comunicación, es ese ida/vuelta que se da con la otra persona. Con las palabras, con lo que decimos, y también, con cómo lo decimos.

Si queres mejorar en tu comunicación… no hagas esto