Los jueces de la Sala F de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial explicaron qué requisitos formales deben cumplirse a los fines de obtener la conversión de la quiebra en un concurso preventivo.

En el caso “Salazar, Jorge Marcel s/Quiebra”, la deudora apeló la resolución que rechazó su pedido de conversión en concurso preventivo -basado en el artículo 90 de la Ley de Concursos y Quiebras (LC)-, por considerar que se había incumplido con la totalidad de los requisitos formales previstos por el artículo 11 de dicha normativa, venciendo el plazo de prórroga otorgado.

El artículo 90 de la LC indica que el deudor puede solicitar la conversión del trámite en concurso preventivo, dentro de los 10 días contados a partir de la última publicación de los edictos que informan sobre la sentencia de quiebra.

En el expediente bajo análisis, el reproche se formuló sobre la base de que la conversión debió ser sustanciada con la sindicatura. El deudor adujo que cumplió con lo ordenado por la magistrada, que la resolución carece de fundamento y que esta no guarda relación con lo que se desprende de las actuaciones.

Además alegó que el rechazo se presentó bajo un excesivo rigor formal, en tanto el pedido se analizó como si se tratase de una empresa de gran envergadura y no de quien lo pide.

Los magistrados Alejandra Tévez, Rafael Barreiro y Ernesto Lucchelli consideraron que “aun cuando se ha admitido jurisprudencialmente en ciertos supuestos el cumplimiento en la Alzada de los recaudos legales para pedir la apertura concursal”, en el caso bajo análisis “no se advierten integrados de manera satisfactoria los requisitos legales exigidos por la LC, 11 en la anterior instancia”.

En este punto, explicaron que la denuncia de bienes formulada carece del detalle exigido por la ley y resultaba incompleta. Además, agregaron que la presentación tampoco hacía referencia a la actividad que desarrolla el deudor ni a los bienes que conformarían el activo.

“Ello así resulta suficiente para desestimar el planteo, máxime cuando se encuentra cumplido en la especie el plazo adicional que otorga la normativa legal para suplir tal ausencia”, indicaron.

En el artículo “Algunos aspectos sobre la conversión de la sentencia de quiebra”, publicado en Erreius online, Marina Crespín explicó que “la conversión consiste en la facultad de ciertos fallidos de obtener en determinados casos, y previo cumplimiento de las condiciones que la ley impone, la declaración de apertura de concurso preventivo, dejando sin efecto la quiebra declarada. Implica la transformación de un proceso liquidativo en un proceso preventivo”.

Y destacó que la conversión de la quiebra a concurso preventivo ha nacido como resultado de la innegable concepción negativa que rodea a todo el proceso falencial.

“Tanto es así que incluso el propio fallido, luego de solicitar su quiebra, puede intentar la conversión de esta al concurso preventivo”, agregó la especialista en el artículo publicado en Erreius online.

Todo sujeto concursable -incluidos los socios ilimitadamente responsables a quienes se les hubiese decretado la quiebra por extensión- puede solicitar la conversión del trámite a concurso preventivo.

No se encuentran facultados para ello ni los acreedores, ni el síndico, ni el juez. Los terceros tampoco pueden solicitar la conversión.

También se encuentran excluidos para pedir la conversión los siguientes deudores:

* El deudor cuya quiebra se hubiere decretado por incumplimiento del acuerdo preventivo.

* El deudor cuyo concurso se encuentra en trámite al momento de ser decretada la quiebra.

“La solicitud de conversión debe efectuarse dentro de los 10 días hábiles contados a partir de la última publicación de edictos. Es admisible el plazo de gracia”, agregó Crespín.

El deudor puede solicitar el plazo adicional de 10 días establecido en el artículo 11 in fine de la LC.

Luego señala que “se encuentra discutido si el pedido de conversión tiene efectos suspensivos respecto del inicio de la liquidación falencial. Para un sector de la doctrina podría interpretarse que la demanda de conversión carece de efecto suspensivo respecto de los trámites de la quiebra”.

El artículo 93 de la LC establece que la conversión solo puede rechazarse por no haberse cumplido los requisitos del artículo 11.

En consecuencia, el deudor debe cumplir los requisitos formales enunciados en el artículo 11 de la LC al solicitar la conversión o dentro del plazo que el juez fije.

Una vez reunidos los requisitos, el juez deberá dejar sin efecto la sentencia de quiebra y dictar la sentencia, declarando la apertura del concurso preventivo.

Cumplidos los requisitos, la experta señala que el juez debe dejar sin efecto la sentencia de quiebra y dictar sentencia conforme a lo dispuesto en los artículos 13 y 14 de la LC.

Entre otras medidas, se deberá oficiar al correo para que no se intercepte la correspondencia del exfallido, a las entidades migratorias, policiales y administrativas que otorgan la documentación para salir del país para informar que el fallido ha transformado su quiebra en concurso preventivo.

Una vez dictada la conversión, el ahora concursado recobrará la administración de su patrimonio bajo la vigilancia del síndico y recobrará la legitimación procesal.

Destacan los requisitos formales que deben cumplirse para convertir la quiebra en concurso preventivo