Por: Richard Amaro Gómez

La base imponible de bienes personales – acciones yparticipaciones societarias

La magnitud del hecho imponible para este tributo es el valor patrimonial proporcional que surge del último balance cerrado al 31 de diciembre de cada año de la sociedad emisora, considerando los aumentos y/o disminuciones en el patrimonio neto que se hubiesen producido entre la fecha de cierre del ejercicio de la sociedad emisora y el 31 de diciembre del año respectivo, cuando el ejercicio comercial no coincida con el año calendario.

En este contexto, es necesario precisar que para determinar el valor de las acciones y participaciones sociales, primero hay que valuar los bienes netos de la sociedad, en base al patrimonio neto del último balance. A estos fines, el decreto reglamentario del Impuesto sobre los Bienes Personales (en adelante, DRIBP) establece que si el ejercicio comercial no coincide con el año calendario, al patrimonio neto, se le sumará o restará las variaciones producidas desde la fecha de cierre del ejercicio económico hasta el 31 de diciembre de cada año.

Asimismo, el artículo 20.2 del DRIBP, respecto de los aumentos, dice lo siguiente:

'…Son aquellos originados en la integración de acciones o aportes de capital, incluidos los irrevocables para la futura integración de acciones o aumentos de capital, verificados entre la fecha de cierre del ejercicio comercial de las sociedades y el 31 de diciembre del período fiscal por el que se liquida el impuesto.

El monto de dichos aumentos incrementará el patrimonio neto sobre el cual se determina el gravamen, en el monto atribuible a las acciones y participaciones cuyos titulares sean personas físicas o sucesiones indivisas domiciliadas o radicadas en el país o en el extranjero y/o sociedades o cualquier otro tipo de persona de existencia ideal, ente o patrimonio de afectación, domiciliado, radicado o ubicado en el exterior.'

Adicionalmente, en cuanto a las disminuciones, el artículo 20.2 del DRIBP establece que son:

'a) Dividendos en efectivo o en especie -excluidas acciones liberadas- correspondientes al ejercicio comercial cerrado por la sociedad que efectuó la distribución durante el período en el que se liquida el impuesto y puestos a disposición en el transcurso de este último, cualquiera fuere el ejercicio comercial de dicha sociedad en el que se hubieran generado las utilidades distribuidas.

b) Utilidades distribuidas por la sociedad con posterioridad al último ejercicio cerrado por la misma durante el período por el que se liquida el impuesto, cualquiera fuera el ejercicio comercial de la sociedad en el que se hubieran generado las utilidades distribuidas.

El monto de dichas disminuciones reducirá el patrimonio neto sobre el cual se determina el gravamen, en la parte atribuible a las acciones y participaciones cuyos titulares sean personas físicas o sucesiones indivisas domiciliadas o radicadas en el país o en el extranjero y/o sociedades o cualquier otro tipo de persona de existencia ideal, ente o patrimonio de afectación, domiciliado, radicado o ubicado en el exterior.'

Ahora bien, la base sobre la cual hay que sumar o restar las variaciones positivas y negativas son los valores económicos del último balance del año calendario ajustado por inflación, ya que se considera el confeccionado conforme a las normas legales vigentes. Por lo que la pregunta es: ¿las variaciones positivas (aumentos) y negativas (disminuciones): ¿deben ajustarse también por inflación?

La respuesta legal es un contundente no. Ello por cuanto no está previsto realizar tales actualizaciones en la norma, más allá de la incidencia en la base imponible. Sin perjuicio de agregar que TODA actualización en bienes personales quedó congelada por el art. 39 de la Ley Nº 24.073 a abril de 1992.

Las inversiones no tradicionales en bienes personales

Desde el capital personal es posible realizar las denominadas inversiones tradicionales, que son básicamente las que se efectúan en activos financieros:

Activo financiero de renta fija: son aquellos que en general se sabe de antemano la renta que van a producir a lo largo de su vida útil, tales como títulos públicos, plazos fijo, títulos de deuda, obligaciones negociables, etcétera.
Activo financieros de renta variable: son, en contrapartida, las que no se sabe de antemano la renta que producen ya que dependen del resultando del ente en el cual se invirtió, tales como acciones, certificado de participaciones en fideicomiso, otras participaciones societarias, etcétera.

Lo ya expuesto son los clásicos activos financieros del país o del exterior. Aunque adicionalmente en la República Argentina se debe agregar como financiación la adquisición de la divisa extranjera dólares estadounidenses. Si bien no se trata de un activo financiero, constituye un instrumento de inversión.

Sin embargo, existen las denominadas 'inversiones no tradicionales' que son diferentes a los activos financieros, pero que pueden aparecer ante el escenario de la volatilidad financiera económica mundial. Básicamente, pueden consistir en:

Bienes inmuebles: en estos casos puede tratarse tanto de inmuebles urbanos como inmuebles rurales destinados a la locación a fin de salvaguardar el capital de ahorro del patrimonio personal. Un ejemplo sería la compra en ladrillos, una opción desde la antigüedad.
Bienes muebles: el caso más típico que aparece es la adquisición de rodados a fines de salvaguardar el capital de ahorro personal.

En los dos casos mencionados no se trata de posesiones de uso ni mucho menos de bienes de cambio, sino de activos económicos destinados a la inversión.

En cuanto al tratamiento en lo concerniente al impuesto sobre los bienes personales, al estar estas inversiones en bienes muebles y bienes inmuebles del patrimonio personal, tendrán el mismo tratamiento que cualquier otro bien personal. Esto quiere decir que no tendrán una valuación diferencial.

En este contexto, por ejemplo, en el caso de los inmuebles como inversión se valuarán por el valor residual histórico versus el valoración fiscal actualizado a la fecha de la liquidación, de los dos el mayor. Asimismo, en el caso de que estén destinados a la locación para casa habitación, siempre que el contrato se encuentra registrado en el RELI y cuya valuación no supere el mínimo no imponible especial para casa habitación, estará exento por la nueva ley de alquileres. Por otra parte, en caso de tratarse de rodados se valuarán por su valor residual histórico versus el valor de la tabla que publique la ARCA.

También te puede interesar:

Bienes Personales: tratamiento de inversiones no tradicionales y las bases imponibles en acciones societarias